jueves, 28 de febrero de 2013

Qué mala es la ignorancia

Acabo de llegar al despacho de mi hija y me ha explicado una historia alucinante. IBF tiene programado un curso para el 9 de marzo sobre Kali Silat, el instructor Fernando Cruces reside en un pueblo de Madrid y es la primera vez que viene a dictarnos un curso, que espero sea el primero de muchos y que patrocina el despacho jurídico de mi hija.
Hace un rato ha recibido una llamada de un señor de Vallecas (Madrid) al teléfono del despacho, que aparece en el poster del evento. 
Pidiendo que anulásemos el curso y amenazando con denuncias, porque en el poster aparece Fernando realizando una luxación al brazo desde el suelo. Y que esa técnica era de Judo y la estaba plagiando. Además que Fernando no está afiliado a la federación de Judo y él si, que en su Dojo eran 25 y ahora sólo son 6 por culpa de los que plagian las técnicas y además realizan cursos a 15 € como los nuestros (para sufragar los gastos de desplazamiento del instructor), que los cursos han de ser más caros porque se tiene que pagar los conocimientos del maestro (yo he estado muchos años sin cobrar por mis clases, debo estar a punto de que me metan en la cárcel).
Que el Kali Silat no está reconocido por el Consejo Superior de Deportes. Que ____________ un practicante de Krav Maga también plagia...Ha llamado a la federación de Judo y le han dicho que no se puede hacer nada. Que esto se podía arreglar en el tatami, porque no saben Judo.
Han estado más de medio hora hablando, seguro que mi hija se ha dejado cosas por explicarme...
En un primer momento me han cogido ganas de reír, pero es que ahora las tengo de llorar. Siglo XXI, tenemos más información de la que podemos procesar y todavía existe gente con una estrechez de miras que me entristece.
Lamentablemente, ha comentado que tiene 32 años, la culpa debe ser de su maestro que no le explicó que el Judo es un deporte marcial, adscrito a una federación deportiva y que por suerte, cada vez hay más artes marciales fuera de las federaciones deportivas. Creando su propias organizaciones (legales) de artes marciales.
Triste pero cierto.
Nos vemos en el tatami.

miércoles, 27 de febrero de 2013

Los programas de grado

Este post viene motivado por una conversación que mantuve el otro día con algunos de mis alumnos. Me puse a evaluar los exámenes que se realizan en las federaciones deportivas y organizaciones marciales y lo que más les sorprendió, fue el hecho de que con el paso de los años, los programas han ido creciendo exponencialmente. 
No tiene nada que ver el programa que yo preparé para 1er dan en 1985 al que preparan mis alumnos actualmente, el actual es mucho más denso.
Yo recuerdo que era un kata por grado hasta marrón y dos más para 1er dan. Hoy te encuentras organizaciones que para 1er dan de karate piden diez o doce katas. Con lo cual no quiero decir ni que sea mejor ni peor, simplemente distinto.
En el programa de kenpo ha sucedido lo mismo, con el paso del tiempo el programa ha crecido en número de técnicas preestablecidas.
Mi duda es: han crecido por simple evolución? o porque los grados más altos lo han decidido así para dificultar y retrasar el progreso de los que van por detrás en grado.
No tengo la respuesta.
Nos vemos en el tatami.